Pese a los descuentos y las promociones, cayó 45% la venta de motos
El sector se desplomó durante marzo y acumuló tres meses en rojo. Las 20 marcas que fabrican en el país solicitaron al Gobierno que cancele el impuesto interno.
El sector de las motos quedó atrapado. La devaluación y los impuestos internos provocaron que un negocio que venía en franca expansión, de golpe comenzara a ver cómo sus niveles de comercialización se derrumbaban.
Según el trabajo mensual de la Cámara de Fabricantes de Motovehículos (Cafam) los patentamientos correspondientes a marzo de 2014 (34.969) sufrieron una caída de 45,23% respecto a igual mes de 2013 (63.858).
Los datos de ventas fueron suministrados por la Dirección Nacional de los Registros de la Propiedad Automotor, y demuestran que las medidas implementadas por las terminales para frenar la caída no fueron suficiente. Según un comunicado de la Cafam, durante marzo las terminales implementaron “una cantidad de medidas para evitar la caída de ventas como descuentos, promociones, extensión de plazos de pago e inclusive, en muchos casos, mejoraron los precios y condiciones previos a la devaluación”.
Sin embargo, el sector no pudo remontar la caída de 7% que acumuló durante el primer bimestre respecto de los dos primeros meses de 2013.
“Nos preocupa poder sostener todas las inversiones realizadas durante los dos últimos años, para el desarrollo de las plantas de fabricación nacional y la capacitación de empleados” dijo Lino Stefanuto, Presidente de la entidad que agrupa a las a las 20 marcas que fabrican en el país (Honda, Yamaha, Susuki, Zanella, Motomel, Mondial, Gilera, Kymco, Maverick, Keller, Guerrero, Ghiggeri, Beta, Cerro, Corven, Brava, Okimoi, Jawa, Appia y Tibo) y que, en su conjunto, son el 1% del PBI.
Frente a esto, y luego de haber declarado la emergencia económica para el sector, los empresarios volvieron a solicitar al Gobierno Nacional que “considere cancelar el impuesto interno a efectos de no paralizar la fabricación nacional de motocicletas alcanzadas por el nuevo gravamen, cuando su valor de fábrica supera los $28.000”. “La propuesta apunta a tratar de recuperar algo la caída de ventas del sector que superó la peor de las expectativas”.
Pero, así como el impuesto golpeó fuerte en las motos importadas y pegó en el corazón del sector –los modelos de 250CC–, la devaluación incrementó los precios e hizo caer las líneas de crédito que utilizaban los sectores de menores recursos en el interior del país en donde las tarifas del transporte público son más onerosas para los bolsillos más humildes.
La Cámara viene proponiendo alternativas para lograr la recuperación del sector, como posibilitar líneas de financiación con tasas reducidas.
Por el lado de los concesionarios de motos –agrupados en la cámara Mottos– también se mostraron preocupados por los números que está mostrando el sector. Diego Dinitz, presidente de la entidad dijo que, por una multiplicidad de causas, “nos han llevado de un panorama optimista, como el que teníamos a fines del año pasado, a este de profunda preocupación en el que nos hemos visto obligados a declarar el este estado de emergencia económica
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